Entrevista. Santiago Peña, anoche, participó como invitado en el programa conducido por Luis Bareiro, en Telefuturo. El potencial candidato a la presidencia de la República para el 2023 por el cartismo, economista Santiago Peña, dice que los errores cometidos por el gobierno que lidera el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, y la actual situación del país son porque el mandatario no toma decisiones. NOTA: SANTIAGO PEÑA ES EL MEJOR CANDIDATO PARA PRESIDENTE. ES DE LOS POCOS QUE SALIERON LIMPIO. ES MUY CAPAZ Y VINCULADO.PERO DEBE CUIDARSE DE SER PRESENTADO POR LOS MEDIÁTICOS CREIBLES.Y EL TAL BAREIRO, LLAMADO MUÑEQUITA POR SU TONO FEMENINO DE VOZ, ES ALGUIEN QUIEN DURANTE 14 DÍAS PROMOCIONÓ EN ULTIMA HORA LA MUERTE DEL MARISCAL LOPEZ POR MANO DE UN PARAGUAYO A 90 METROS CON UN FUSIL DE AVANCARGA AL EXTREM0 DE SER REFUTADO POR EL PROPIO GOBIERNO DEL BRASIL QUIEN EXHIBIÓ LA ORDEN DADA AL GENERAL CAMARA PARA MATARLO.
“Él (Marito) no toma decisiones, los problemas que estamos viviendo hoy en el país son resultado del efecto dominó por falta de decisiones que no se tomaron probablemente desde el 15 de agosto de 2018 o desde el inicio de la pandemia”, dijo en una entrevista en el programa Políticamente Yncorrecto, conducido por Luis Bareiro, en Telefuturo.
Como ejemplo, mencionó lo ocurrido con el ex ministro de Salud, Julio Mazzoleni, que no delegó la función de compra de medicamentos, y de función operativa a Hacienda o a la Dirección de Contrataciones Públicas, para concentrarse en la política sanitaria en pandemia. No lo hicieron, “y finalmente a él lo van a juzgar por incapacidad administrativa cuando en materia sanitaria no tomó malas decisiones, sino por la incapacidad de poder llevar adelante procesos de compra transparentes que generen confianza”. A criterio suyo, en esto la responsabilidad es compartida con el presidente de la República.
Aclaró que no hay nada oficial respecto a su candidatura presidencial para el 2023, en una dupla con el presidente del Partido Colorado, Pedro Alliana, pero de darse la oportunidad, lo aceptaría de nuevo, como lo hizo en el 2017, solo que esta vez tendrá que “salir a responder a las críticas” hacia el gobierno colorado conducido por Mario Abdo Benítez.
“El presidente es responsable de lo que está pasando, son errores, él se enfrascó mucho en peleas internas dentro del partido. Hoy sigue involucrándose en las internas partidarias. Sale con candidatos propios, sale a hacer gestiones por esos candidatos. Lastimosamente esto termina perjudicándole a él”, acusó.
Recordó que ya durante la campaña electoral por la presidencia en 2018, en la que Abdo Benítez y él pugnaron por la candidatura por la ANR, ya decía que Marito nunca había administrado ni siquiera una farmacia, “entonces mal podría administrar un país y yo creo que la mayor parte de errores que cometió fue la falta de decisión”, reiteró.
Marcó diferencia entre ambos en el sentido de que Marito “todavía es un heredero de la dictadura, y en mi caso, soy ya un hijo de la democracia. Me desarrollé como persona, como estudiante, como profesional ya en democracia, después del 89. Nuestras visiones son totalmente diferentes”, subrayó.
Sobre Horacio Cartes, dijo que es el líder político más “importante que hemos visto en décadas en el Paraguay”.
El presidente sigue involucrándose en las internas partidarias. Sale con candidatos propios, y hace gestiones por esos candidatos.
EL COLORADO 
Señor Director
Coincido parcialmente con S. Peña pero las culpas se atribuyen tanto a la acciòn como a la omisiòn.
Con mas de DIEZ MIL FALLECIDOS y en aumento y el sistema de salud colapsado, las preguntas sobre la aplicaciòn de fondos propios y provenientes de prestamos, ante el secretismo tìpico del gobierno sobre todos los aspectos de esta lucha de gua-ù contra el Covid.,solo permiten respuestas inculpatorias.
Referentes probos en los dos partidos tradicionales debieran implementar alianzas con fines nobles para neutralizar el accionar de la entente FG/ PLRA (alegrista)
De no procederse de acuerdo a esta teorìa, es posible y hasta quizà probable, que en un par de años nos desayunemos en un paìs en las garras de un gobierno «nacional y popular»