Por Rogelio Antonio Careaga, PHD por la Universidad de Stanford
El quid de la cuestión no es si hubo o no hubo negociación, sino la aparición en escena del abogado argentino Sebastián Vidal, que según artículos publicados por ABC, tiene alguna relación con el Presidente Mario Abdo Benitez.
El señor Vidal debía recibir la sideral suma de 26 millones de dólares por sus servicios. Cabe preguntar ¿qué servicios iba a prestar? ¿Era un intermediario a la vez que abogado de una de las partes? No está claro cuál es el papel que este abogado argentino iba a cumplir en una negociación entre dos Estados soberanos.
Según Villamayor, la propuesta de negociación surgió a iniciativa del presidente interino de Venezuela, Sr. Juan Guaidó. Sin embargo, el venezolano de apellido Troconis que, según Villamayor, trajo la propuesta, había declarado que le conoció a Sebastián Vidal en el despacho de la presidencia de nuestro país.
La declaración de Troconis parece más creíble que la de Villamayor. Pues, sería muy poco probable que la contratación del Sr. Vidal haya sido pura coincidencia y que no haya tenido nada que ver con su relación profesional con un tío de nuestro presidente..
Por tanto, es razonable sospechar que el señor Vidal aparece en escena debido a la conexión, aunque indirecta, con el presidente paraguayo. Asimismo, otro elemento que llama poderosamente la atención y añade a la sospecha de que algo se tramaba, es la enorme suma que se le iba a pagar.
Este enredo, si no ensucia a nuestras autoridades, los convierte en sospechosos de intentar insertar en las potenciales negociaciones los 26 millones de dólares de honorarios a Sebastián Vidal. Presumiblemente, para luego proceder a repartirse esos millones entre ellos. No tenemos información para incluir o excluir a los venezolanos, que supuestamente habrían propuesto la negociación, de la posibilidad de recibir, bajo algún concepto, parte de los 26 millones de dólares.
EL COLORADO 