El general Caballero en su quinta heredada de su esposa, propietaria y fallecida poco despues de un parto. Aquí se encuentra con su hija Saturnina.. Corre el año 1910, y recién volvió del exilio al ser elegido presidente su amigo Liberato Rojas, padre el la primera ofrenda de sangre poco 5 años antes de la guerra de Chaco. Su nombre, Adolfo Rojas Silva, asesinado por el teniente Bolivianbo Tejerina, en en 1927
Aquí posa con su hija rodeados de una fronda fabulosa. Muy cerca se halla el famoso chorro de aguas cristalinas donde cada mañana se baña. Luego comienza a contestar su correspondencia seguido de un almuerzo con carne y verduras. Enseguida una siesta de una hora para luego recibir la visita de numerosa concurrencia, afiliados al partido por él fundado y que ayer recordamos un año más.