Por Osvaldo Bergonzi
Hasta si se quiere, se trata de una pornografía política pues desnuda las bajas pasiones de un partido al que creíamos con alguna dignidad de no desnudarse públicamente ante la ciudadanía mostrando tanta impudicia. En notas anteriores este medio ya advertía de la violación fragrante del código electoral del que fui uno de sus redactores entre junio de 1989 a enero de 1990.
A la prensa escrita, radial y televisiva le recuerdo que un delito electoral no otorga derechos de clase alguna a nadie, ni aquí ni en el Congo. Mal entonces pueden expresar que la medida otorgada por la justicia en favor de un derecho de la ANR condenando un hecho ilícito puede atacar la libertad de expresión.
Los partidos y movimientos políticos pueden gastar un millón de dólares o más si desean. Pero siempre identificando su propaganda con la institución política a la que representan y nunca usurpando nombre y color ajeno para promover candidaturas distintas a las proclamadas por otro partido o movimiento político En este caso, la ASOCIACION NACIONAL REPUBLICANA.
Deseo recordarles que ejercí el cargo de vicepresidente de la Comisión de Libertad de expresión de la ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE RADIO Y TELEVISIÓN (AIR) durante casi 5 años representando a propietarios de radioemisoras y teledifusoras paraguayas (APRAP) Así mismo participé en representación de un diario de gran circulación ante la SOCIEDAD INTERAMERICANA DE PRENSA (SIP) en varias ocasiones lo cual puede dar testimonio el propietario del diario ABC Color.
Por eso mismo quedé sorprendido del contenido de una volanta de ese medio el día de hoy, 15 de marzo. Por lo visto, el titulador no leyó la ley ni consultó previamente con el asesor jurídico del referido diario. De haberlo hecho se hubiera enterado que un delito electoral no ampara ni otorga derecho alguno de LIBERTAD DE EXPRESIÓN O PROPAGANDA ni aquí ni en ningún otro lugar del mundo civilizado.
Apreciado Osvaldo: La ley 834/96, que establece el Código Electoral, en su Capítulo III, Del Nombre y Símbolos de los Partidos Políticos y Movimientos Políticos, establece en su Artículo 24 textualmente: El nombre, las siglas, los lemas, colores, embemas, distintivos y símbolos constituyen atributos exclusivos de los partidos y movimientos políticos. No podrán ser usados por ningún otro partido o movimiento político, asociación o entidad de derecho privado dentro del territorio nacional. Los mismos deberán expresarse claramente en el acto constitutivo pero podrán ser cambiados o modificados posteriormente, siempre que no induzcan a confusión con los de otros partidos o movimientos políticos.
Más claro, caña blanca. Pero como hoy, esto es un cachibache de país, ya no como en el Gobierno Colorado del General Stroessner, entonces cualquier atorrante y en especial los efraudines parlanchines, vendedores de medicinas de almas y carentes de vacuidad de pensamientos, que los suplen con pirotécnias verbalisticas, tratan de confundir al mayoritario y centanario electorado colorado, con VENDIDOS Y VENIDOS A MENOS EN EL GLORIOSOS Y SACROSANTO PARTIDO COLORAD, COMO LO SON ESTAS VIBORAS RASTRERAS DE ESTA RASPUTÍN DE HUGO LÓPEZ, ESTE RASPUTÓN DEL CONCEPCIONERO DE UNDASE, Y EL CHUSSPAMEDIA INTENDENTE DEL APÁ.
UN GRAN ABRAZO REPUBLICANO, VIVA EL PARTIDO COLORADO, VIVA EL GENERAL CABALLERO, VIVA EL GENERAL STROESSNER Y VIVA LA REPÚBLICA INMORTAL DEL PARAGUAY. MUERAN LOS TRAIDORES Y MERCENARIOS.
Estimado Osvaldo:
Me uno a los aplausos a los apoderados que promovieron la acción judicial para impedir que se continúe violando el Código Electoral, y que afectan los derechos e intereses de nuestra asociación política. Ahora bien, considero que los responsables no son únicamente los liberales que usurpan los símbolos partidarios. También lo son los correligionarios que se prestan a dichas actividades perniciosas a los intereses y al futuro del Partido. Cuando integraba el Tribunal de Conducta Partidario, allá por el año 1992 al 96, surgió un grupo de aproximadamente 450 afiliados bajo la denominación de FRANJA COLORADA, que hicieron campaña electoral en favor del candidato del Partido Encuentro Nacional. La Junta de Gobierno nos remitió los antecedentes de la inconducta de los mismos, y al final del sumario el Tribunal de Conducta resolvió unánimemente su expulsión del padrón partidario por traición al Partido Nacional Republicano. Igualmente, cuando volvimos a integrar el Tribunal de Conducta desde 2007 al 2010, por denuncia del Comité Ejecutivo, el órgano rector de la disciplina y de la ética partidaria dispuso la exclusión del Padrón partidario de todos aquellos afiliados que integraron nuevos movimientos políticos con candidatos electorales a los cargos de presidente y vicepresidente de la república, senadores, diputados, gobernadores, etc en las elecciones generales de 2008. Inclusive, de quienes participaron como apoderados, integrantes de mesas electorales y veedores de otros partidos y movimientos contrarios al nuestro. Salvo que esté errados fueron unos 4.500 afiliados. Creo que es hora que el actual Tribunal de Conducta tome cartas en el asunto, y disponga el inicio del sumario respectivo para determinar la conducta anticolorada de todos los afiliados que se prestan a los intereses de los liberales, oviedistas, etc. De lo contrario estas traiciones volverán a producirse hoy, mañana, o cuando fuere.
Querido Humberto: Hice lo propio cuando ejercí el cargo de presidente del Tribunal de Conducta (2002 – 2007). En mi caso de un tirón los eliminé administraqtivamente del padrón partidario a un lote importante. Pero luego le propuse al Presideente Hermino Cáceres y el aceptó y propuso a la junta la reafiliación con la sola presentación de un billete con nº de cedula. Así hicimos porque muchos afiliadosnos mostraron los lugares donde les hicieron firmar documentos, siempre a la puesta del sol y en lugares oscuros. Cierto o no los tuvimos en cuenta y así entendió el presidente Herminio Cáceres y la junta de gobierno.Muchos regresaron de este modo sencillo al partido. Pero sintieron el rigor. De lo contrario fundemos el Partido Divertido como alguien alguna vez exclamó en la junta. Saludos afectuosos.