Una costumbre que se ha hecho común en el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, es una obligación para que las mujeres accedan a un puesto laboral en dicha institución estatal, donde impera el desorden, la oligarquía, la corrupción, la impunidad y el desvío de fondos para cubrir los actos políticos de su titular, Efraín Alegre, cuyo apellido no le ayuda para nada a este personaje calificado como político de cartón.
Pero a lo que nos referiremos por ahora, es una típica presión de los Jefes y Directores de Departamentos hacia las personas del sexo femenino que no quieran ser trasladadas o comisionadas a otras unidades, y para aquellas que desean ingresar como funcionaria de la institución.
Aquí hay abundante denuncia formal de varias empleadas de larga trayectoria en la Secretaría de Estado. Son las que operaban como técnicas en administración en el Departamento de Ingresos. El director de esta dependencia que se autodenomina, Lic. Víctor Risso, aplica un técnica sutil para saciar sus deseos. Primero solicita dos opciones a las funcionarias para que ellas no sean discriminadas y para que se les mantenga en el cargo: primero, su afiliación al Partido Liberal Radical Auténtico, segundo, ser la novia de este sujeto y de paso acceder a sus peticiones. Estos son requisitos indispensables para continuar en el cargo.Si acceden, las mujeres quedan en sus funciones, mantienen sus categorías y los beneficios por grado de mayor responsabilidad. Caso contrario si se niegan, pierden esos beneficios y se las remiten al freezer. Así también ocurre en las demás dependencias, se dejan de lado a mujeres que tienen títulos universitarios, se las envían al pasillo,y si molestan se les remiten en calidad de comisionadas a cualquiera de las instituciones estatales como castigo.
Cuando el Partido Colorado estaba en el poder,este tipo de situaciones no se registraban, se respetaban la trayectoria, la profesionalidad de los funcionarios y funcionarias. Nunca se ha pedido a nadie sus afiliaciones, siempre se ha tenido en cuenta la idoneidad, la capacidad y alto grado de profesionalismo, pero hoy, esos atributos quedan de lado para cambiarlos por el acoso a las aspirantes en ingresar en la función pública y si acceden, no hace faltan reservados ni moteles, las oficinas bastan y sobran, luego ganan el trabajo y sostienen sus pucheros. Esto pasa en el MOPC.
Estas denuncias fueron hechas a las autoridades superiores del Ministerio, pero ni al Ministro Efraín le interesa tanto..Son cosas pasajeras y muy domésticas(??) que no requiere importancia. Estas son las desprolijidades de este señor Victor Risso, y no solamente él, está también un Vice Ministro de Finanzas hijo de un Liberal expulsado del país durante la dictadura y que volvió al Paraguay del cambio: Juan Félix "Pon" Bogado Gondra. Nada menos que lleva su mismo nombre y es apodado Nito, pero la prensa lo conoce como el Gordhiño. Este sí que es harina de otro costal, no solamente pide “chan chan”, sino aprieta con dinero en efectivo a las mas bellas empleadas y ni qué decir a las mujeres que desean ingresar a la institución. Tampoco se les escapan las señoras casadas quienes piden socorro contra este maniático. Para ingresar o ascender en el cargo, nada de examen de admisión, directamente al grano, A LO BENITO MUSSOLINI, rápido como los gorriones, mientras que a los hombres, les hacen rendir siete u ocho veces y como no puede ofrecer favores, estos que desean trabajar, simplemente van a la cuneta con las recomendaciones de su correligionarios liberales. Haremos un amplio comentario mas sobre este caso y habrá denuncias por doquier.
TOME NOTA LA NUEVA JUNTA DE GOBIERNO PARA EL 15 DE AGOSTO DE 2013.
…Y ojalá esas denuncias vayan acompañadas por las firma de tooodas las mujeres funcionarias del MOPC,sean estas perjudicadas o beneficiadas,por una solidaridad de género y por dignidad de seres humanos,porque si todas estas damas se unieran en un rotundo rechazo y proclama por todos los medios de comunicación,dando los nombres y las circunstancias en que se produjeron estos atropellos,haciendo un «escrache»en tiempo y forma,nuestro Excelentísimo Primer Mandatario no tendría más remedio que cajonear a estos libidinosos,y se le podría exijir que aplicara una sanción ejemplar privando a los de comprobada venalidad de la posibilidad de que vuelvan a ejercer de por vida ningún cargo público,evitando así que estos socabadores de la moral sigan nutriéndose de la ignominia de nuestras compatriotas y de las arcas del Estado,ya que en definitiva terminan convirtiendo nuestras oficinas publicas en burdeles.