Personeros del gobierno ahora se preocupan de las bajas recaudaciones. Y que quieren, si en el país reina la inseguridad más absoluta. En el micro centro se cierran negocios cada semana. Los productores del agro ya no realizan turnos nocturnos temerosos de ser asesinados o secuestrados por los ex seminaristas de Lugo. La cosecha hay que levantarla en una, dos o tres semanas o sino el grano cae y se pierde. De manera que al eliminar un turno la producción en toneladas por hectárea irremediablemente disminuirá. En tanto el gobierno se vanagloria de repartir limosnas, limosnas que son el fruto del trabajo. Pero pronto – de seguir las cosas así – nadie producirá y no habrá recaudaciones para dar limosnas o pagar el sueldo de los amigos de los ex seminaristas de Lugo. En ese caso ¿qué harán?
Por Osvaldo Bergonzi
En la vida se aprende por la experiencia propia. Pocos son los que aprenden por la experiencia ajena. Estamos frente al primer caso. Se trata de “idealistas”, llámemelos así para no decir otra cosa. Por eso reparten dinero a los pobres y se enorgullecen de ello. Pero lo que llama poderosamente la atención es que el periodismo en general no condene en forma unánime esa práctica que ha llevado al fracaso a muchos países.
Al convertirle a un sujeto en limosnero se le roba su dignidad y se le condena de por vida a ser pobre, y además, a enorgullecerse de ello que es lo peor.
Alfredo Jaeggli anuncia que este sistema se impondrá si no se lo saca a tiempo a Lugo y plantea en forma constante su juicio político. Nos hemos pronunciado sobre ello en números anteriores y no creemos que la ANR deba tomar iniciativas al respecto puesto que este problema nos trajeron los “amigos” del PLRA.
La suerte está echada y solo nos queda ver los acontecimientos. El primero de ellos será la renovación de autoridades en los municipios. Si el partido colorado gana en la mayoría de pueblos y ciudades el país está salvado y el socialismo del siglo 21 se hará humo. Pero si por desgracia gana el PLRA sepan bien que los marxistas gobernarán por mucho tiempo y después no lloren diciendo “POR QUÉ LES VOTÉ.
Salvo Jaeggli y unos pocos, los liberales paraguayos de la actualidad son marxistas disfrazados, de otra manera no se explica que gobiernen las minorías ante su vista y paciencia. Eso debe entender Jaeggli. El problema no es con Lugo sino con su propio partido volcado al marxismo. Solo 6 senadores responden a la doctrina del PLRA. Los demás son cualquier cosa menos liberales.
Cuesta entender pero es así. Por otra parte lo del cambio fue un vulgar cuento de las mil y una noches puesto que la corrupción no ha sido remangada sino por el contrario pulida como el intento de estafa en el caso de las tierras de Texeira que tiene dos propósitos. Alzarse con varios millones de dólares y de paso establecer un corredor liberado de la soberanía del pueblo paraguayo al efecto de establecer sus bases guerrilleras los ex seminaristas de Lugo.
Corremos traslado al PLRA para que nos explique como salir de este atolladero terrible al cual sumergieron al pueblo paraguayo cuando lo eligieron a Lugo como portaestandarte al solo efecto de derrocarnos y así aplacar su enorme odio hacia la ANR, odio ancestral de cáliz amargo colmado con la última gota por, Nicanor Duarte Frutos, convertido en un surtidor de procacidades lanzadas al éter contra propios y extraños. Esa es la verdad. Esto fue fruto del odio y el rencor que todo destruye. Por eso las cosas andan mal en el Paraguay. A nuestros parlamentarios le decimos. No se dejen seducir por los liberales pues todo lo que hacen siempre sale mal. Esperemos nuestra hora y confiemos en el pueblo que nos observa y hace comparaciones. Entre tanto instamos a los 24 movimientos internos que elijan bien a sus candidatos para continuar ganando municipios como lo venimos haciendo con cuatro recientes victorias al hilo.