Vamos por buen camino. Los sectores internos y la comisión ejecutiva nos dieron una clase de cómo se debate con lenguaje de caballeros. No saben la alegría que le dieron a todos sus correligionarios que por fin ven una puerta abierta. Sigan así que todos los colorados les seguiremos, de eso no tengan la menor duda.
Por Osvaldo Bergonzi
Esto le trasladamos a nuestros convencionales que en diciembre se reunirán. Debatan con altura para que salgamos más fortalecidos aun y que el final se convierta en una fiesta colorada.
Los malos no lo éramos tanto afirmó tajantemente Fadul. El pueblo paraguayo en este momento está haciendo comparaciones, sopesando lo malo pero también lo bueno pues no se puede tapar el sol con la mano. Los miles de kilómetros de rutas pavimentadas, usinas hidroeléctricas, hospitales, escuelas y obras elocuentes, existen, no pertenecen a MATRIX., es decir, a la ciencia ficción
Por eso el discurso gastado de 61 años de destrucción va quedando en ridículo. Y contra el ridículo no hay defensa. El pueblo no es idiota y le molesta que supongan eso. Saben distinguir lo malo de lo bueno.
Observan que los colorados tratan de corregir errores pasados. Ven que sus sectores internos y sus autoridades se reúnen dentro de un marco de respeto. Eso les molesta terriblemente a cierta prensa que “tanto nos ama”. Llaman a los dirigentes para tirarles la lengua y ya no andan encontrando eco pues éstos se percatan de sus innobles propósitos de hacernos pelear entre nosotros. En tanto nuestros adversarios ofrecen a la opinión pública un triste espectáculo. Son gobierno y nadie sabe quien dirige el timón dado que el presidente es una figura accidental sin experiencia en el ejercicio del poder. No sabe ni entiende lo que dice. Cambia a cada momento. El pueblo lo observa a él y sus aliados. Hasta parecen internos de un nosocomio.
Por eso nosotros debemos mostrar equilibrio, cordura, sensatez. A la hora señalada nuestros convencionales deben obrar en consecuencia tomado decisiones apropiadas y predecibles. Debemos alejarnos de la locura de los enfrentamientos estúpidos. Por su parte los sectores internos deben buscar alianzas y proponer a ciudadanos dignos en las listas a cargos electivos para despertar el interés del pueblo. Todavía hay un largo recorrido de manera que tienen tiempo de sobra. Felicitamos a aquellos que abandonaron los desplantes y la soberbia para sustituir su lenguaje por una más conciliatorio. Suerte a todos.
EL COLORADO 